VI ORDINARIO viernes 22 de febrero de 2019
La Cátedra de San Pedro, Apóstol
Blanco Fiesta
1Pe 5,1-4; Sal 22; Mt 16, 13-19.
Los súper héroes tienen una base en la realidad. Por una parte expresan el anhelo de la humanidad por ir más allá de las capacidades normales; por otro quieren hacer presente a quienes ha hecho algo especial.
Jesús tiene fama ya por muchos aspectos. Pregunta a sus discípulos qué dicen los demás de Él y sucede que lo identifican con los caudillos del pueblo. Cuando pregunta quién dicen sus discípulos que es, ya viene la respuesta de la fe.
Dios se revela en Jesús y este don le es dado a Pedro, y de inmediato Jesús expresa la elección: “Y yo te digo a ti que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia”. Este diálogo es humano y es de fe.
Pedro todavía tendrá que madurar su fe, comprender poco a poco su misión hasta convertirse en el testigo fiel: “he sido testigo de los sufrimientos de Cristo y participante de la gloria que se va a manifestar”, testigo del Cristo Pascual.
El discípulo escucha y aprende, vive la Palabra. El apóstol es enviado como discípulo misionero. Y su misión es enseñar, fortalecer en la fe, promover la comunión y la misión de la Iglesia.
Esa es la Enseñanza de Pedro, su Cátedra, que ahora nos recuerda lo esencial: “Apacienten el rebaño que Dios les ha confiado y cuiden de él no como obligados por la fuerza, sino de buena gana, como Dios quiere”.
Pedro sabe bien quién y cómo es el verdadero Pastor, Jesucristo. Por eso pide a los actuales pastores que actúen en sintonía con el Señor. Y este es el ministerio de Pedro que permanece en la historia por el Obispo de Roma, el Papa.
Celebrando la
Cátedra de San Pedro, fortalecemos nuestra fidelidad a la Iglesia a través del
Papa y los Obispos